Prepararé un dulce chocolate de esperanza,
día a día para ti, esperando a que retornes.
Te extrañaré cuando no estés conmigo,
lloraré porque no soporto más el no tenerte.
Besaré tu sombra, querré abrazarla, pero no sentiré tu calor,
No podré ver tu mirar, ni sentir tus brazos amando mi alma.
Pero recordaré cada cosa de ti, y te encontraré en mis sueños, y mis sueños harán que pronto este a tu lado.
Tu alma seguirá enganchada a la mía,
y el aroma de tu espíritu me dirá que aún me sigue amando.
porque ahora no me dejarás ni un instante sola,
pues yo tengo tu alma y tu mi vida.
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