Siempre existe una o más canciones que te hacen sentir más triste de lo que ya estás. Es en ese momento, donde entiendes porque te sientes así...es que cada cosa, por mas pequeña que sea, te duele exorbitadamente.
Luego de dormir varias horas para no sentir este vapor dentro de mi corazón, me siento a escribir tratando de explicar como me siento, pero aún no puedo describir con suma perfección la gravedad de este suicidio. Mil y un cosas me ahogan en un llanto infinito, aquel llanto que aún no entiendo porque no termina. Ya no puedo estar así. Mientras escribo, trato de aguantar las lágrimas, pues sé que alguien puede entrar al cuarto y derrumbar mis ideas en un segundo.
Leo lo que he escrito, no me esfuerzo mucho en llorar, porque las lágrimas caen facilmente de mi mejilla hacia mi corazón nuevamente. Es que aún no me desahogo del todo, es como reprimir tanto dolor en un cofre del que sólo yo tengo la llave, nadie mas que yo. Me duele otra cosa mas, no poder aquietar lo supuestamente ya moderado; seguir así, con esta pena que no tiene nunca acabar, esta muerte en vida que sólo yo entiendo, que sólo yo vivo; pues no quiero que nadie mas la viva, nisiquiera tu, o tu, sólo yo.
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