miércoles, 22 de septiembre de 2010

uno

La maldad, aquella traicionera e inteligente oscuridad que a veces envuelve, que a veces traiciona. Es como si una sombra de pasión ajena se quisiera meter en tan bello cielo rosado.
Maldad que atormenta, inhibe y se quiere hacer eterna...
Y tu sin poder salir de ella, maldad que te ahoga, te atrapó y hasta en tu confidente se convirtió...
Y todo esto sólo por un supuesto momento de luces "nocheras" y coquetas.
Y los recuerdos, que son maldad infiel, persiguen tus pasos; y la sombra que dejaste un lado por buscar libertad, te encuentra de nuevo, y de nuevo te encuentras en el mismo lugar.

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